Desde su nacimiento, el PCR y la JCR arraigaron entre los mejores hijos e hijas de la clase obrera y el pueblo. Miguelito fue uno de ellos: obrero de Ford (reconocido por trabajadores y delegados), secretario de la JCR de la zona norte del gran buenos aires y miembro de su comité central.
Miguel era un joven alegre, solidario y querido en su localidad. Entre sus compañeros del secundario se destacó por su rebeldía, organizando sus luchas. Desde la parrillita de la casa de su mamá y su papá fue conocido por los jóvenes de los barrios a quienes ayudó a nuclear y sumar a la lucha revolucionaria. Con su compañera, Blanca, tuvieron un hijo, David.
Tuvo la posibilidad de viajar a China en la época de la revolución maoísta y conocer de cerca la experiencia. Volvió fascinado con la experiencia de la construcción socialista y la lucha de aquellos años por impedir la restauración capitalista. Con sus amigos y conocidos entraron de a tandas en la fábrica de las zonas. El ingresó a Ford, en Pacheco, y allí organizó la agrupación clasista 1 de Mayo. Sembró la semilla del clasismo que enfrentó a la dictadura, la generación de la gran toma de la fábrica en 1985 y desde donde saldrían muchos de los compañeros que lideraron la lucha de Terrabusi-Kraft en 2009.
La dictadura lo secuestró el 1 de septiembre de 1976. Tenía apenas 23 años. Miguel permanece desaparecido, pero la llama clasista y revolucionaria que dejó encendida en la zona norte del gran Buenos Aires sigue viva en las luchas obreras y populares de la región.
Memoria, verdad y justicia
Desde el 17 de noviembre del año pasado, y luego de más de 40 años de dolor por la desaparición forzada de nuestro compañero, en los Tribunales de San Martín se están incorporando las declaraciones en la causa por su secuestro. David (su hijo) y Blanca (su mamá) tuvieron la importante decisión de buscar la verdad. El 8 de noviembre nos movilizamos con la más amplia unidad, ante la prisión domiciliaria otorgada a Luis Patti uno de los primeros genocidas con privilegio del gobierno de Macri.
Los compañeros Ricardo Fierro y Roberto Carpano declararon como testigos de la causa, acompañados por David y el Dr Ramallo. Nuestro Partido es querellante también de la causa. Fierro (Secretario Gral de la Juventud del PCR en aquellos años) fue contundente en su declaración señalando a quienes amenazaron a Miguel hasta su secuestro. Con la bronca y dolor guardados durante años esperando este momento, fue muy valiente la declaración del compañero.
Ante tantos años de injusticia y dolor David, Blanca y sus compañeros vamos a hacer lo imposible por buscar la verdad de los hechos y seguir buscando justicia. Sabemos que va a ser difícil porque estamos ante un gobierno que otorga prisión domiciliaria a genocidas y no abre los archivos de la dictadura abandonando a las víctimas del terrorismo de estado. Es una tarea de honor rodear y aportar a la causa por un juicio justo y para que los genocidas vuelvan a la cárcel común.
MIGUEL MAGNARELLI PRESENTE